Los Cocoteros,13 años de la mayor tragedia de personas migrantes en nuestras costas

Este 15 de febrero se cumplen 13 años de una de las mayores tragedias que ha provocado la inmigración en Lanzarote. En Los Cocoteros ve pasar el tiempo un monolito que los recuerda a ellos y a quienes se batieron con el mar para rescatar a los supervivientes, solo seis, y recuperar los cuerpos de los fallecidos.
En la madrugada del 13 de febrero de 2009, en la costa de Guelmin, Marruecos, Brahim J. apremiaba a las 29 personas, hombres y mujeres, muchos de ellos menores, que habían concertado con él un viaje en una embarcación. Con los bolsillos llenos con el dinero de quienes embarcaban, daba las últimas instrucciones a Yousef F. y Mohamed S.B, los dos patrones que debían guiar la patera hasta las costas Canarias, puerta de la ansiada Europa.
El organizador del viaje se quedó en tierra. La barquilla, de unos seis metros de eslora, "totalmente inadecuada" para el transporte de personas como probó la sentencia condenatoria dictada en 2010, partió con 31 personas. Sólo uno llevaba chaleco salvavidas. Dos días después, el 15 de febrero de 2009, frente a las costas de Los Cocoteros, en Guatiza, a unos metros de la esperada nueva vida, la patera “se subió a una roca que dejó levantada la proa mientras que la popa quedó sumergida en el agua, y volcó después de que una ola la cubriera y sus ocupantes se pusieran en pie” fruto del nerviosismo y queriendo terminar ya con un viaje efectuado en condiciones “inhumanas”.
Murieron 25 personas. Se salvaron cuatro pasajeros y los dos patrones. El portador del chaleco salvavidas fue uno de los supervivientes. Cuatro meses después, en junio de 2009, el organizador de ese viaje llegó a la isla en otra patera. Junto a los dos patrones fue juzgado, y condenado, por la Audiencia Provincial por un delito contra los derechos de los extranjeros penado con siete años de prisión y por 25 delitos de homicidio imprudente, por los que les imponen un total de 75 años de prisión.
Un año después, coincidiendo con el primer aniversario de la tragedia, se descubrió un monolito y se les tributó homenaje en su memoria. Además de los representantes institucionales, el surfista uruguayo, Cristian Hunt, estuvo presente en aquel recordatorio. Hunt se batió contra el mar para salvar la vida a los seis ocupantes restantes de la patera.
La peregrinación política a Los Cocoteros se repitió cuatro o cinco años más. Hasta que dejó de hacerse. Tampoco en estos días de frenética pelea política con las personas migrantes como telón de fondo, no consta que nadie haya ido al lugar, aunque solo sea a sacarse una foto. Puede que alguno ni siquiera sepa que eso ocurrió.