Astrid Pérez confía en que el Estado se siente a negociar el pacto migratorio del PP y Canarias
La presidenta del Partido Popular de Lanzarote, Astrid Pérez, ha valorado de forma muy positiva el plan contra el descontrol migratorio acordado este martes por el Partido Popular y el Gobierno de Canarias. Un plan, que se condensa en diez puntos, que se pondrá a disposición del Gobierno central en la búsqueda del consenso necesario para afrontar la crisis migratoria, un problema de Estado, que afecta directamente a las islas.
Astrid Pérez insiste en que si el Gobierno de Sánchez no ha afrontado la reforma de la Ley de Extranjería, que puede hacerlo mediante Decreto Ley, es sencillamente porque “no tiene voluntad política de hacerlo, porque no quiere y porque el problema migratorio le es ajeno”. “De hecho, hemos visto como ha sido un asunto que ni le ha preocupado ni le ha ocupado lo más mínimo en todos los años de gobierno en los que ha mirado para otro lado”.
“Hasta ahora, -apunta Pérez-, la realidad es que no hemos visto que Sánchez haya pedido permiso al Partido Popular para modificar otras normativas que sí le han interesado, como es el caso de la amnistía donde sí ha actuado de forma unilateral y con premura para mantener el apoyo parlamentario de los independentistas y sostenerse en el gobierno”.
Según la líder insular del PP, este acuerdo “da respuesta a la falta de política migratoria del gobierno de Sánchez y a la ausencia de medidas efectivas que hagan frente a la situación de emergencia a la que se ha llegado por la inacción del Ejecutivo”.
Astrid Pérez considera que el PP y su presidente, Alberto Núñez Feijóo ha mostrado una vez más su “sentido de Estado” con un acuerdo “serio y realista”que implica a todas las comunidades autónomas gobernadas por el PP, además de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.
“Sánchez tiene una nueva oportunidad de pasar página, abandonar la política errática, y asumir su responsabilidad y sus competencias en materia migratoria y de extranjería”. “El Gobierno tiene que mirar de frente la realidad de migratoria y poner en marcha medidas en consonancia y consenso de las distintas comunidades”, señala Astrid Pérez, quien lamenta la falta de voluntad del Ejecutivo.
Para Astrid Pérez, el acuerdo responde a las necesidades en materia migratoria “al tiempo que cumple con el objetivo primero de salvar vidas, el que las personas sean atendidas con dignidad y que nuestro país no se convierta en refugio para las mafias que trafican con seres humanos “.
Un paso atrás según Nueva Canarias
Nueva Canarias-Bloque Canarista (NC-BC), integrante del pacto canario por las migraciones, sostiene que el acuerdo bilateral del presidente, Fernando Clavijo, con el líder del PP estatal, Alberto Núñez Feijóo, responsable de tumbar la tramitación de la ley de extranjería en el Congreso de los Diputados pactada por el Ejecutivo canario y estatal; es un paso atrás en la solución de la crisis humanitaria de los menores migrantes no acompañados.
El portavoz parlamentario de NC-BC, Luis Campos, aseguró además que implica un alejamiento del espacio de consenso y unidad hasta ahora logrado en Canarias. El grupo canarista entiende que este acuerdo supone el “sometimiento” de Clavijo a la política migratoria del PP, cada vez “más mimetizado” con el discurso xenófobo de Vox.
El documento suscrito ayer en Santa Cruz de Tenerife entre Feijóo y Clavijo, según el portavoz parlamentario de NC-BC, es un retroceso en el consenso articulado en el Archipiélago y con el Ejecutivo del Estado para modificar el artículo 35 de la ley de extranjería para la distribución obligatoria de las niñas y los niños entre todas las comunidades del Estado. “Nos coloca en un momento más complejo”, advirtió Luis Campos.
A pesar de que Clavijo justificó la traición del PP a Canarias, el pasado mes de julio, en el Congreso de los Diputados, el portavoz canarista reconoció que la visita de Feijóo generó ciertas expectativas al abrirse la posibilidad de que conociera la realidad que afronta en solitario el Archipiélago y para que fuera convencido de que era necesario tramitar la reforma legal y defender sus propuestas con la presentación de enmiendas a negociar. Sin embargo, las cuatro exigencias del PP para impedir la modificación del artículo 35 y que Clavijo defendió que eran el motivo de la separación del acuerdo en las Cortes Generales, ayer se convirtieron en 10 puntos con 21 apartados, es decir, en una política integral; cuestionó el diputado de NC-BC. Firmado además, añadió, de manera bilateral. “Curioso que critiquen los acuerdos entre dos para otros asuntos como la financiación autonómica, pero sean útiles para la crisis humanitaria de los menores migrantes”, observó.
El resultado es que “ha servido para distanciarnos más” del consenso, a los integrantes del pacto canario, censuró el diputado canarista. Para Luis Campos, es sorprendente y un “paso atrás” que el Ejecutivo canario suscribiera este documento porque “aleja el foco de la solución” mediante la modificación puntual de la ley de extranjería para ser trasladada a una política integral, “algo que reconocemos que es necesario, pero somos conscientes de que hay que ir paso a paso y que es complejo”. Una política global, señaló, que no ha podido ser consensuada a nivel del Estado y que la Unión Europea necesitó de seis años para acordar el “más que cuestionado” pacto de asilo. Mostró su preocupación por el “cambio de rumbo” de un Clavijo, cada vez más enfrentado al Ejecutivo estatal.
La aproximación de CC al PP es tan evidente, cuestionó, que el acuerdo entre sus líderes coincide, “casi en su totalidad”, con una proposición no de ley del Partido Popular en la Cámara Baja. Para Nueva Canarias-BC, desde ayer Coalición Canaria ha asumido la política migratoria del Partido Popular, en su conjunto. “Nos aleja aún más de la tarea” asumida en el pacto canario por las migraciones, alertó. Luis Campos afirmó que “nos encontramos con el sometimiento” del Gobierno de Canarias a la política migratoria de PP, cada vez más mimetizado con el discurso de xenófobo de Vox.
