Un senador presentable

Un senador presentable

Parece que sí, tras un par de intentos fallidos, Lanzarote tendrá un senador presentable. Un señor de los pies a la cabeza del que nadie duda. Y al que respetan hasta los que han sido sus adversarios en la carrera política. Veníamos de una muy mala racha. Los últimos senadores que ha tenido Lanzarote nos hacían pasar más vergüenza que otra cosa. Hubo quien se tatuó en la frente la palabra Senador y la usaba para posturear hasta perder la propia identidad; otro de pasado discutible, y alguno más reciente de comportamiento similar al de un becario, mascota de los sexagenarios miembros de comisiones de investigación de película de Torrente. Engreído y vanidoso incapaz de pedir perdón a quien tanto daño quiso hacer. Eso sí, envuelto en una capa de humildad tan fina que apenas cubre sus miserias y carencias que, por lo demás, ha tratado de disimular a golpe de efecto. Ora corriendo cual Forrest Gump, ora versionando al vendedor de crecepelo, sólo que con cafetera y hornillo. Y, de repente, Manuel Fajardo Palarea. Senador por Lanzarote y La Graciosa. Un tipo serio, honrado y cuyo prestigio personal y profesional nadie osa poner en duda.

Respeto

Manuel Fajardo Palarea será secretario de la Mesa del Senado. Así lo ha decidido la Permanente de la Comisión Ejecutiva Federal, máximo órgano de dirección del Partido Socialista en la reunión que han mantenido este lunes en la sede de Ferraz, en Madrid. La noticia, conocida a última hora del lunes, ha generado una inmediata corriente de simpatía a la que no ha sido ajena la secretaria general del PSOE en la isla, la también presidenta del Cabildo, María Dolores Corujo quien ha expresado la “enorme satisfacción” que le ha producido este nombramiento. “La designación de Manolo Fajardo para un puesto de tanta responsabilidad supone un reconocimiento indudable a su trayectoria y supone toda una oportunidad para Lanzarote y Canarias, que ganarán peso en la Cámara Alta”, ha señalado. Para añadir a continuación su convencimiento de que la presencia de Fajardo en la Mesa del Senado “supondrá un plus de visibilidad para la isla, que será aprovechado por el senador lanzaroteño”. 

Paciente

Manuel Fajardo Palarea ha sabido esperar su momento. Su nuevo momento. Secretario general del PSOE insular entre 2000 y 2008, fue consejero y vicepresidente del Cabildo entre 2003 y 2007 y parlamentario regional desde ese año hasta 2015. Un movimiento de la regional de su partido le dejó fuera de los puestos de salida al Parlamento de Canarias en las autonómicas de ese año y, a cambio, fue nombrado Viceconsejero de Justicia. Fiel a su estilo no engañó a nadie: sólo duró año y poco. Regresó a su despacho profesional hasta que lo fueron a buscar para iniciar la carrera al senado en la que ya ha ganado dos veces en pocos meses. Hombre joven -cumplirá 60 años en marzo- parece más motivado que nunca en este su renacer político. Apostaríamos a que Lanzarote se lo agradecerá. Lamentablemente la política insular no va sobrada de gente cabal y capaz. Ahora sólo falta que haya legislatura. Que no es poco.