Propuestas para el sector primario de Lanzarote y La Graciosa (I)

Por la Organización Profesional Agraria PALCA-LA UNIÓN se propone, entre otras, como medidas para afrontar los problemas del sector primario las líneas de actuaciones que se indican a continuación, si bien se ha de partir de una premisa previa: la cooperación es hoy más imprescindible que nunca para superar la crisis que sufrimos dado que no hay salidas individuales, y cuanto antes se comprenda antes saldremos adelante.

 

 

Los agricultores han estado sometidos a cortes de suministro y frecuentes periodos de escasez de agua. No obstante, en este momento existe un excedente de agua desalada producida por Canal Gestión Lanzarote a raíz del cierre de hoteles, complejos de apartamentos, restaurantes y cafeterías; por lo que esta coyuntura se ha de aprovechar, aunque sea de forma temporal, para tratar de salvar las cosechas de los cultivos hortícolas de la pertinaz sequía que se viene padeciendo por el agro insular.

 

Sin embargo, pensando a largo plazo y a los efectos de procurar un incremento de nuestra soberanía y autosuficiencia alimentaria, se hace necesario la adopción de medidas que garanticen agua suficiente para la agricultura, pues hay muchas zonas agrícolas que tienen limitado el riego a un solo día a la semana y no siempre es el mismo día, lo que dificulta el normal desarrollo de los cultivos.

 

Asimismo, se debe también mejorar sensiblemente la calidad del agua destinada a la agricultura por los efectos perniciosos que tiene su alta salinidad para nuestros suelos. Al igual que se tienen que autorizar todas las peticiones de contadores paralizadas desde hace varios años que se han venido denegando con la repetida coletilla “se niega el contador por falta de caudal en la red”. Tenemos que romper con la dinámica de que muchos jóvenes-agricultores desistan de poner en marcha sus iniciativas emprendedoras por no disponer de agua.

 

También se tiene que subir la ayuda al coste del agua concedida por el Cabildo ya que las Islas de Lanzarote y La Graciosa han sido injustamente excluidas, en claro agravio comparativo con el resto de los agricultores de las demás islas, de la subvención que por importe de OCHO MILLONES DE EUROS ha sido recientemente concedida por el Gobierno de Canarias para riego agrícola.

 

 

Para que la mujer y hombre del campo perciba una retribución digna por su trabajo que les permita continuar con su actividad se necesita mejorar la comercialización de sus cosechas. ¿Cómo se consigue este objetivo?

 

Responder a esta cuestión exige observar lo que sucede en otras islas: ya sea con el plátano (más de cuatrocientos millones de kilos), el tomate (sobre los sesenta millones de kilos), o la piña tropical (del orden de tres millones de kilos).  En todos estos cultivos contemplamos como la venta de las producciones anuales se efectúa exclusivamente a través de Cooperativas o SATs. Es decir, es la comercialización conjunta lo que ha posibilitado, con las lógicas dificultades del mercado, una mejor defensa de los intereses de los agricultores, y a su vez ha permitido que dichos cultivos se mantengan, pues son estas figuras asociativas las únicas que pueden garantizar a los agricultores obtener una rentabilidad por la venta de sus cosechas.

 

Éste, y no otro, es el camino que se debe emprender por los agricultores de Lanzarote para dar viabilidad a sus cultivos, por lo que desde el Cabildo de Lanzarote se debe fomentar y ayudar en la constitución y funcionamiento de estas figuras asociativas como medio de garantizar la supervivencia de un sector tan esencial como el primario.

 

 

La Granja viene afrontando continuos problemas que están afectando gravemente al desarrollo y modernización de muchas de sus instalaciones, un claro ejemplo lo constituye el matadero sobre el que pende una amenazadora advertencia de cierre. Estas dificultades están motivadas por la calificación urbanística del suelo donde está emplazada catalogado como 'paso de jable', según el Plan Insular de Ordenación de Lanzarote (P.I.O.L.). Sería necesario, por lo tanto, un cambio en su calificación lo que precisaría: o bien, la aprobación de un nuevo P.I.O.L. (también valdría una modificación puntual del anterior); o, que por el Ayuntamiento de Arrecife se apruebe su Revisión del Plan General de Ordenación para que se puedan legalizar las instalaciones de La Granja.

 

Ambas alternativas se nos antojan muy lejanas en el tiempo, a tenor de las experiencias acumuladas en los casi treinta años transcurridos desde la aprobación del P.I.O.L., sin que hasta el día de hoy se le haya buscado solución. Y, lo cierto es que el sector primario no puede seguir esperando... Encontrándose la Granja en esta tesitura hemos de mirar hacia otros emplazamientos que permitan mejorar los servicios que demanda el sector. Por ello, una vez estudiadas diversas posibilidades y consultado a profesionales y técnicos, creemos que la mejor alternativa viable sería el uso del conocido como Complejo Agroindustrial de Teguise. El mismo tiene suelo e instalaciones para el desarrollo de las actividades propias de agricultores y ganaderos.

 

Por lo que se propone, una vez acometidas las necesarias obras de acondicionamiento, el traslado al Complejo Agroindustrial del matadero, talleres, laboratorios, almazara, oficinas, demás maquinarias existentes en La Granja. Lo que supondría además contar con la gran ventaja de ubicar, en un lugar geográficamente localizado en el centro de Lanzarote y con espacio suficiente, casi todas las infraestructuras del sector primario. Esta medida se ejecutaría mediante la adquisición por parte del Cabildo al Ayuntamiento de Teguise de las naves, oficinas y suelo de titularidad municipal.

 

Los terrenos de La Granja se destinarían al cultivo y ensayo de nuevas variedades vegetales, al saneamiento de las semillas y plantas, así como a la mejora de la cabaña ganadera. Todo ello, en aras de trasladar todas las experiencias que se vayan acumulando a los agricultores y ganaderos para incrementar el rendimiento de sus cultivos y explotaciones ganaderas. También, en dicho espacio se podría poner en funcionamiento el  demandado banco de semillas locales, así como aulas de formación para agricultores y ganaderos.