Cuatro de cada diez ejercen su derecho al voto en Arrecife
El sino de los tres mil votantes lanzaroteños que viven en el extranjero
Si volviera a votar el 30 por ciento de los residentes ausentes serían decisivos para elegir al presidente del Cabildo, a la vista de las ajustadas predicciones de las encuestas.
Ahora mismo hay 2.992 lanzaroteños mayores de edad residiendo en el extranjero. Son un montón, sobre todo si pensamos que hace diez años sólo eran la mitad. En un decenio se ha doblado la cantidad de conejeros expatriados, muy probablemente debido a la grave crisis económica que se desató a partir de 2008 y que los forzó a buscar nuevos horizontes de vida en otros países.
La cifra ha sido obtenida del censo electoral de españoles lanzaroteños residentes en el extranjero. Son residentes ausentes, ya que viven en el extranjero, pero que siguen conservando su derecho al voto. Para ello, los que residen de forma permanente en el extranjero se inscriben obligatoriamente en los consulados, por lo que se puede conocer cuántos son en todo momento.
¿Diáspora conejera en años de récords turísticos? ¿Cómo es eso? Aunque el término diáspora puede ser exagerado en la medida en que alude a la dispersión de un grupo humano que abandona su lugar de origen, llama la atención que su número no se haya reducido después de dos años consecutivos de récords de afluencia turística. Quizá no se fueron sólo por motivos económicos pero, en cualquier caso, parece que ya no les hace cuenta regresar.
El censo electoral lanzaroteño está compuesto por casi 94.000 votantes
El canario ha sido históricamente un pueblo emigrante, sobre todo a América, formando parte activa de la colonización del nuevo mundo. Puede hablarse de diáspora canaria durante la primera mitad del siglo XX debido a la elevada emigración que se produjo hacia antiguas colonias españolas en Sudamérica y Cuba. De hecho, existen congregaciones de canarios y sus descendientes en varios países latinoamericanos, como Venezuela, al punto que algunos la llaman la Octava Isla del archipiélago canario. Será la novena, en todo caso…
El censo electoral lanzaroteño está compuesto por casi 94.000 votantes en estos momentos. En el censo hay tres categorías de electores: los españoles residentes en España, los extranjeros residentes en España con derecho a voto en las municipales y europeas, y los electores residentes-ausentes que viven en el extranjero. Del censo de los electores residentes-ausentes que viven en el extranjero, cuatro de cada diez ejercen su derecho al voto en Arrecife. El resto se reparte de manera proporcionada entre los demás municipios de la isla.
Con el voto rogado la participación se desplomó por debajo del 5 por ciento
Además de plantearse si algún día retornarán o no, los españoles residentes en el extranjero tropiezan con un obstáculo a la hora de ejercer su derecho al voto. Tras una reforma introducida en 2011, la participación se desplomó por debajo del 5 por ciento.
En las elecciones generales de 2008 votó el 32 por ciento de los españoles residentes en el extranjero y en 2011 el número se redujo al 5 por ciento. La culpa se atribuye al voto rogado que se introdujo en 2011 y que obliga a los españoles emigrados a pedir ejercer el voto expresamente y cada vez que hay elecciones. Es un verdadero coñazo, por lo que diversas voces se han alzado pidiendo su eliminación.
Con esta nueva norma, aunque está aumentando el número de electores españoles emigrados, se está produciendo un descenso en la participación. Es un contrasentido, por lo que muchos se plantean coger un avión para poder votar y eludir lo que ya se denomina ‘gymkhana electoral española’. Si volviera a votar el 30 por ciento de esos tres mil lanzaroteños españoles residentes en el extranjero serían decisivos para elegir al presidente del Cabildo, a la vista del apretado resultado que predicen las encuestas.
