Opinión

El posible reencuentro de Rivera y Sánchez

El posible reencuentro de Rivera y Sánchez

Según las últimas encuestas publicadas, Ciudadanos sería hoy el partido más votado en el ámbito del Estado. La formación que lidera Albert Rivera obtendría un 27,1 % de los apoyos, frente a un Partido Popular que sería segundo con el 23,2 %. El PSOE se situaría a menos de dos puntos de su rival tradicional y la formación que dirige Pablo Iglesias, Podemos, retrocedería en las encuestas hasta el cuarto puesto con el respaldo del 15,1 % del electorado.
 
Los datos de las encuestas solo sirven para medir un estado de ánimo coyuntural y en estos momentos nada parece indicar que pueda haber un adelanto electoral, ni entre los ciudadanos existe, por lo tanto, la tensión que siempre precede a unas elecciones. Sin embargo, resulta significativo que por primera vez la posición de predominio de Ciudadanos aparezca de un modo tan rotundo en los diferentes sondeos realizados después de las últimas elecciones en Cataluña. Precisamente, el éxito alcanzado por Inés Arrimadas el 21-D es una de las claves que han servido para reforzar la posición de la formación naranja en el ámbito estatal. El discurso claro y firme de Rivera y los suyos en defensa del orden constitucional ha calado en gran parte de la ciudadanía, que exige claridad ante el desafío secesionista y no calculadas ambigüedades.
 
Uno de los datos que más llama la atención de los que pueden extraerse en los últimos sondeos publicados es la respuesta dada cuando se pregunta qué partido tendría ahora el proyecto político más adecuado para el futuro de España. Un 44 % de los encuestados señala directamente a Ciudadanos. Muy por detrás sitúan al PP, con un 20 %. Muy significativo también resulta el dato de que la mayoría de los electores de los otros tres grandes partidos -PP, PSOE y Podemos- también piensan que Ciudadanos tiene el mejor plan para el futuro de España. No acaban ahí los elementos relevantes. Otro dato revelador que se extrae de los últimos sondeos que se conocen es que la suma del centroderecha -Ciudadanos y PP- superan en alrededor de 14 puntos a las fuerzas de izquierdas y rompe así el convencionalismo aceptado durante años de que España era mayoritariamente de centroizquierda.
 
A día de hoy, las próximas elecciones generales no están en el horizonte próximo. Sin embargo, ello no evita que se empiecen a hacer cábalas acerca del próximo Gobierno del Estado. Si a los resultados de los últimos sondeos de opinión nos atenemos, parece claro que al gobierno de derechas que tenemos hoy le relevará otro gobierno de derechas. Ahora gobierna el PP con el apoyo -entre otros- de Ciudadanos y a partir de las próximas elecciones, de cumplirse los pronósticos de las encuestas, gobernaría Ciudadanos con el apoyo del PP.
 
Sin embargo, lo que parece a simple vista tan sencillo la realidad lo hace muy difícil, casi inviable. Los casos de corrupción que persiguen al Partido Popular le están generando un enorme desgaste ante los ciudadanos. Además, la estrategia llevada a cabo en Cataluña, que a priori le reforzaba en el resto del Estado, se le está volviendo en contra. Es precisamente Cataluña la que está catapultando a Ciudadanos hacia el Gobierno de España. La posición firme, nítida y contundente que han mantenido -y mantienen- los de Rivera ante el desafío rupturista ha calado más que el desdén y la pasividad con la que los populares lo han afrontado.
 
Para Ciudadanos sería un lastre muy pesado un acuerdo con el PP de Rajoy. Los populares tendrán que llevar a cabo una operación de regeneración a fondo -y no le vale cualquier maquillaje- después de las próximas elecciones generales. Necesitan una renovación total. En este orden de cosas, un hipotético apoyo del PP a un gobierno de Ciudadanos dejaría todo el espacio del centro derecha en manos de los de Rivera. En ese escenario, el lugar que necesitaría el PP para iniciar el desgaste de su competidor en el espacio de la derecha sería la oposición. Los pronósticos sociológicos sobre el futuro de Pedro Sánchez y los suyos tampoco son muy alentadores. El resultado de las próximas elecciones puede producir un cataclismo dentro del PSOE -otro más- que le obligue a un cambio de estrategia en la política de alianzas.
 
Probablemente, el PSOE salga de las próximas generales sin poder sumar a su izquierda y con una tentadora invitación a la búsqueda de un acuerdo de gobernabilidad por la derecha. El acuerdo de las 200 medidas para gobernar España firmado por Rivera y Sánchez puede ser un buen punto de partida para un gobierno Ciudadanos-PSOE. Si finalmente Ciudadanos gana las próximas generales, el PP preferirá irse a la oposición y Ciudadanos buscará el apoyo socialista, y no es en absoluto descabellado que Sánchez caiga en esa tentación.
 
Publicado el paulinorivero.com el 28 de enero.

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