Darle pa’rriba a la ciudad
Una ciudad sostenible ha de ser densa y compacta. Todavía más: una ciudad contemporánea ha de ser densa y compacta. Más aún: una ciudad ha de ser densa y compacta. Por nada en particular, porque somos muchos y hay que gestionar con eficiencia los escasos recursos públicos que se asignan a satisfacer las necesidades colectivas de la población. En Lanzarote el territorio es un recurso escaso y valioso, y, además, cada vez son más las personas que optan por vivir en las ciudades. Así que hay que darle pa’rriba a Arrecife.
La cuestión es que hay que darle parejo pa’rriba a la ciudad, así que lo que no puede ser es en unas zonas sí y en otras no. Un aumento de edificabilidad generalizado, como mínimo una planta más, para densificar la urbe y para democratizar los beneficios del urbanismo, lo cual es un principio general del planeamiento, y para distribuirlos equitativamente. Y por semejanza a la tradición en el medio rural de regalar una parcela a los hijos para que se hagan su casa. Como esto no es posible en las ciudades, su equivalente en la urbe sería permitir una planta más. Y hasta dos.
Menos la primera línea, todo lo demás que crezca hacia arriba todo lo que se pueda
El Plan General supletorio de Arrecife en tramitación que ha redactado el Gobierno de Canarias no contempla esta posibilidad, salvo en dos casos. Uno es el Islote del Francés, que debe tener patente de corso visto lo bien que es tratado, y el otro es el Suelo Urbano Consolidado AD1-Triana, una figura inadecuada, por cierto, para permitir que el frente sur de fachada de la calle Triana pueda aumentar una planta más. Aquí, el redactor recurre a una actuación de dotación, cuya función es incrementar las dotaciones públicas de un ámbito de suelo urbanizado, y no es este el caso.
Si la figura es esa, pues esa misma: actuaciones de dotación desde la primera línea construida del frente litoral hacia atrás, hasta el límite construido de la ciudad. Menos la primera línea, que ya cuenta con siete u ocho plantas, todo lo demás que crezca hacia arriba todo lo que se pueda. Seguramente aliviaría muchos de los problemas de vivienda que padece la población y abarataría la prestación de servicios públicos. Un modelo intensivo frente a otro extensivo es la clave. Densa y compacta. Y con muchos árboles, parques y jardines.
