Chilascos fuera

Una vez han constatado su irrelevancia en el juego interno, los chilascos del PSOE, fieles a su propia definición, han decidido coger puerta y apuntarse en otra partida. Las cartas del palo que se han dado de baja son, de momento, los triunfos de lo virado, pero sólo de la sota al tres. La malilla, el rey y el caballo, por ahora, ha decidido no dar el paso y mantenerse en retaguardia, a ver cómo viene la jugada.

 

Lo idos han hecho un Casimiro, voz que ha referencia a la espantada del exlíder socialista gomero para fundar su propio partido (ASG) y erigirse en el árbitro de la política regional y en factótum absoluto de La Gomera. Pero no es fácil emular la operación gomera en Lanzarote, básicamente porque no hay espacio político que cubrir, aunque el nombre escogido para la nueva formación expresa una clara vocación: Agrupación Socialista Lanzaroteña.

 

Tampoco sería la primera en la isla que significados dirigentes del PSOE se reconvierten al insularismo pasándose, con armas y bagajes, al PIL para acabar, luego, en CC, con o sin parada previa, como aquella ACON de efímero recuerdo. El virus es viejo y, por resistente, no ha sido erradicado. Brota cuando un destacado dirigente socialista, que ha tenido mando en plaza, pierde su cuota de poder interna y se siente desplazado y ninguneado, y está convencido de que su extraordinaria valía política no puede perderse por el sumidero porque, sin ella, la isla se iría al garete. El virus está compuesto por un poco de adicción al poder, otro poco de egolatría y una pizca de vanidad. Entonces va y se apunta a otro partido.

 

Con lo bien que se está en casa con la familia y recogido disfrutando de la amistad.