Arrecife contra el cambio climático
El Proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética que se tramita en el Congreso de los Diputados afecta directamente al municipio de Arrecife de tres maneras. Uno, movilidad urbana sostenible. Según las estadísticas, el transporte es el sector con mayor peso en las emisiones de gases de efecto invernadero, al punto de que el tráfico por carretera, por sí solo, representa un 25% del total de estas emisiones, de las que un tercio se concentran en aglomeraciones urbanas. Para paliarlo, el Proyecto de Ley establece como obligación que los municipios de más de 50.000 habitantes y los territorios insulares constituyan zonas de bajas emisiones no más tarde de 2023, e indica que dichas áreas impulsen medidas de movilidad eléctrica compartida. Arrecife cuenta con 63.000 residentes y tramita su Plan de Movilidad Urbana Sostenible.
Dos, emisiones contaminantes a la atmósfera causadas por las actividades industriales. La producción de energía eléctrica en Lanzarote es muy dependiente del petróleo, que se utiliza como combustible para alimentar la planta de Punta Grande que, a su vez, nutre de energía eléctrica el proceso de desalinización del agua del mar. Muy contaminante. El objetivo de la neutralidad climática de la Unión Europea en 2050 obliga al uso intensivo de energías limpias y renovables con estos fines, como las procedentes del viento y el sol. Y tres, el sector del transporte marítimo y puertos ha de reducir paulatinamente sus emisiones. El Puerto de Arrecife es un apetecible destino para el turismo de cruceros, cuyas embarcaciones, en general, recurren a combustibles de muy baja calidad que no dejan de alimentar los buques mientras permanecen atracados. Muy contaminante.
Menos mal que parece que va como un tiro el crecimiento del parque de turismos y vehículos comerciales ligeros sin emisiones directas de CO2.
