50 años de retraso

Desalación de agua de mar aplicando energías renovables. Esta idea sobrevuela Canarias desde mediados del siglo pasado, pero sólo entre unos pocos muy escogidos. Más de medio siglo después de la instalación en las Islas de las primeras plantas potabilizadoras (Lanzarote, Fuerteventura, Gran Canaria…), el Instituto Tecnológico de Canarias, dependiente de la Consejería de Economía, Industria, Comercio y Conocimiento del Gobierno de Canarias, y la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria han inaugurado la primera edición del Curso de Posgrado en ‘Desalación y Uso de Energías Renovables’.
 
Aunque es bienvenida, llega muy tarde esta formación universitaria especializada en nuevas tecnologías de desalación y aplicación de energías renovables para evitar el uso de combustibles fósiles. Por eso la iniciativa es de ovación cerrada: hacia los promotores del curso y hacia todas las mentes que se quedaron en el camino predicando en el desierto que esa era y es la apuesta. A estos últimos les hicieron poco o ningún caso, por lo que los inquietos deben tener presente que el pensamiento innovador suele estar demodé en estas Islas en casi todos los ámbitos. Para que perseveren y no se aburran a las primeras de cambio.

Comentarios