Opinión

¿Por quién doblan las campanas?

¿Por quién doblan las campanas?

Muchos de ustedes puede que hayan leído el libro de Hemingway o visto la película de Gary Cooper sobre la guerra civil española: ‘Por quién doblan las campanas’. Ahora los ciudadanos del municipio de Teguise tienen una tercera posibilidad de disfrutar de esta obra maestra de la literatura o del cine.
 
Este mes de julio el alcalde del Ayuntamiento de Teguise, Oswaldo Betancort (CC), con la habitual pompa y boato que le caracteriza ha dado un nuevo giro a este famoso título. Gracias a este regidor, la nueva versión de este clásico se ha completado con una lapidaria frase que por fin nos descubre el final de esta pregunta: ¿Por quién doblan las campanas? Doblan por ti, alcalde.
 
Y es que nuestro insigne alcalde en una más de sus ególatras ocurrencias ha considerado que su nombre merecía figurar grabado para la eternidad en las campanas que el Ayuntamiento de Teguise ha tenido a bien donar a la Iglesia.
 
Se me plantean no pocas preguntas con respecto a este hecho. Uno, ¿considera el alcalde a todos los habitantes de la villa aquejados de sordera colectiva? Dos, ¿no son suficientes las tres campanas que había y que tañían de forma estruendosa? Tres, ¿se considera el alcalde un personaje histórico de tal magnitud para que con nuestros impuestos quiera perpetuarse para generaciones futuras grabando su nombre en la campana? Cuatro, ¿es suficiente para el ego de nuestro alcalde solo una campana o en futuras fechas veremos su nombre grabado en la fachada de monumentos de Teguise o esculturas de César…? Quinto, ¿es posible que en el futuro el ayuntamiento bautice y rotule parajes naturales de Teguise con el nombre de ese gran regidor? No sé, se me ocurre que podría rebautizarse la Playa de Famara como Playa de Famara Oswaldo Betancor; o el castillo pase a ser Castillo Guanapay Oswaldo Betancort… 
 
Seis, ¿en caso de condena judicial por posibles delitos de corrupción, prevaricación o cualquier otro relacionado, como ha pasado con otros alcaldes de nuestra isla, tendríamos que borrar también su nombre a costa del presupuesto del ayuntamiento? Siete, ¿existe la posibilidad de que los miembros de su gobierno municipal imiten las ocurrencias del alcalde y pongan también sus nombres a las esculturas, playas u otros elementos identificativos de Teguise? Y ocho, ¿se conformará nuestro famoso personaje histórico con continuar rigiendo solo un municipio o dada su megalomanía pasará a encabezar las listas para metas más de acuerdo con su estatus, como el Cabildo insular o la lista al Parlamento de Canarias?
 
Señor alcalde, menos campanas grabadas y más calles asfaltadas. Menos gastos en darse autobombo, y más en solucionar los problemas de los vecinos de Teguise. Ante estas cosas, se pregunta uno en manos de qué personajes estamos, que no dudan en bautizar una campana de la iglesia de todos con su nombre. Eso sí, no con su dinero, sino con el de nuestros impuestos. 
 
Antonio Becerra es coordinador del grupo local de Ciudadanos (Cs) en Teguise.

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