Turistas en invierno

El verano se va y hemos visto muy pocos turistas, pero, tal y como está evolucionando la pandemia, nada presagia que vayamos a verlos en otoño. Así que a ver cómo se presenta el invierno. Estaba cantado. Por eso Canarias trata de planificar la temporada turística de invierno con el grupo TUI y fijar estrategias que garanticen los flujos de turistas. Eso pasa por rebajar los actuales índices de incidencia de la COVID-19 en las Islas, que están llevando a países emisores a advertir sobre ese riesgo a sus ciudadanos o bien a desaconsejar el viaje al Archipiélago.

 

Lo perentorio es convertir Canarias en un destino seguro, por lo que urge revertir cuanto antes la actual situación sanitaria. Ello permitiría garantizar la seguridad de la población y del viajero, también de regreso a su país, para lo cual es esencial hacer test PCR en origen y en destino. Hay que correr porque la temporada de invierno se inicia en noviembre y Canarias se configura como único destino de sol y playa viable para atender la demanda europea, teniendo en cuenta que las opciones de larga distancia quedarán descartadas.

 

TUI es el mayor grupo turístico del mundo. Posee una cuota de mercado en Alemania del 27,7% (en enero de 2020) y en Canarias, tras la quiebra de Thomas Cook, pasó a controlar el 34,4%. De cara al invierno, TUI tiene una previsión de demanda de viajes de tres millones de personas. Con las restricciones vigentes, se estima que la capacidad de TUI en Canarias asciende a 72.000 plazas mensuales, lejos aún de las 174.000 plazas regulares que el turoperador tenía programadas a las Islas en agosto de 2019. Menos da una piedra.