141 millones para el plátano

141 millones para el plátano

El Gobierno de Canarias ha pagado 71 millones de euros de las ayudas del Programa Comunitario de Apoyo a las Producciones Agrarias de Canarias (POSEI) correspondiente a la campaña 2019 a los productores de plátano con Indicación Geográfica Protegida. Se completa así el pago de los 141,1 millones de euros asignados por la Unión Europea y que beneficiarán a unos 7.700 productores de plátano del archipiélago. Precisemos: de algunas islas del archipiélago. Vale.
 
Lo lees y te tiemblan las piernas. Son 141 millones al año para el plátano, casi tanto como el presupuesto del Cabildo de Lanzarote para el presente 2020, que asciende a 175 millones. Para el Gobierno regional, esta subvención tiene como objetivo “mantener el cultivo de la producción de plátano en las islas, reforzando su estructura mediante las organizaciones de productores que potencian un producto de calidad, diferenciado, comprometido con el medio ambiente, que crea paisaje y que es competitivo”. Vale.
La ayuda a la uva es de sólo siete millones para todas las Islas
 
El POSEI recoge las medidas de apoyo a la producción agraria canaria. Las líneas de actuación que contempla este programa son, entre otras, el mantenimiento de las actividades agrarias tradicionales para salvaguardar el tejido económico y social de las zonas rurales, incrementar el porcentaje actual de autoabastecimiento de los productos frescos en Canarias, y facilitar el acceso de la producción canaria a otros mercados. Vale.
 
La Unión Europea aporta cada año 260 millones de euros para apoyar las producciones agrarias canarias, de los que sólo tres llegan a Lanzarote, un poco más del 1%, tan solo. Visto de otra manera, la ayuda al plátano canario asciende a 141 millones de euros. Sin embargo, la ayuda a la uva es de sólo siete millones para todas las Islas, de los que tres millones corresponden a Lanzarote. No sé cómo lo ves tú, pero mira que la uva crea paisaje y tal, por lo que esta distribución parece bastante desequilibrada. Y lo peor es que no hay manera de corregirla. Pues no vale.

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