El sueldo de Eva

Se podrá suspender de sueldo a la alcaldesa de Arrecife por no cumplir y hacer cumplir los acuerdos plenarios. Incluso se la podrá suspender de empleo, moción de censura mediante y si cuadran los números. No admite duda. Las mayorías, en democracia, son las que mandan, aunque propongan que todo quisque se tire por un barranco de uno en uno y en fila india, exagerando un poco. Aunque no gusten, hay que aceptar y cumplir con el mandato de las mayorías. Ahora bien, de igual modo es exigible que se diga la verdad para justificar la suspensión de sueldo a la alcaldesa. “Una alcaldesa que no se pone en la piel de comerciantes de la avenida y que actúa de forma negligente, hiriendo de muerte al tejido comercial de la ciudad, no puede seguir cobrando del dinero público del Ayuntamiento”. El argumento es que la reapertura de la avenida al tráfico va a dinamizar el comercio en la zona, lo cual es falso. Queda bien para hacer demagogia, pero no es cierto. Los conductores no van a entrar con sus coches en establecimiento alguno, ni la sensación de fluidez en el tráfico rodado va a mejorar las cajas de los comercios y elevar la moral de los comerciantes. Mejor llamar a las cosas por su nombre: “Le quiero quitar el sueldo a la alcaldesa porque el cierre de la avenida está fastidiando a algunos socios del Casino”, y cosas por el estilo, que sí se ajustan a la verdad.

Ernesto Cedrés